Los coches eléctricos han ganado terreno en las calles y carreteras de España, atrayendo cada vez más la atención de los conductores. Gracias a una oferta más amplia de vehículos con mayor autonomía y las restricciones de circulación en algunas ciudades, el número de coches eléctricos vendidos ha experimentado un impresionante crecimiento del 61% en 2018, alcanzando las 13,882 unidades matriculadas. Pero, ¿te has preguntado alguna vez cómo funciona un coche eléctrico?

Funcionamiento básico

En esencia, un coche eléctrico se diferencia de los vehículos convencionales por su sistema de propulsión, el cual está compuesto por uno o más motores eléctricos que se alimentan de energía almacenada en una batería recargable. Esta batería se puede recargar conectando el vehículo a una toma de corriente eléctrica o aprovechando la energía generada durante las frenadas mediante un sistema de autoregeneración.

Componentes principales

1. El motor eléctrico

El motor eléctrico es el corazón del coche eléctrico, transforma la energía eléctrica en energía mecánica, la cual impulsa el vehículo. Además, también puede recuperar energía a través del sistema de frenada regenerativa, lo que contribuye a mejorar la eficiencia y autonomía.

El motor eléctrico se compone de tres elementos principales:

  • El cargador. Este componente recibe la electricidad de la toma de alimentación, ya sea un enchufe doméstico o un wallbox, y la convierte en corriente continua, permitiendo que la batería pueda almacenarla.
  • El inversor. Encargado de transformar la corriente continua suministrada por el cargador en corriente alterna trifásica. Esta energía será utilizada por el motor, el sistema de iluminación, el equipo de música y otros elementos del vehículo.
  • El controlador. Gestiona la corriente eléctrica según las necesidades, dirigiéndola hacia el motor, el equipo de música u otras funciones. Además de supervisar la recarga de las baterías para garantizar un funcionamiento eficaz y seguro.

2. Las baterías

Las baterías son uno de los componentes más cruciales de un coche eléctrico, ya que determinan la autonomía, las prestaciones y el costo final del vehículo. Estas baterías almacenan la energía en forma de corriente continua que llega desde el cargador. Actualmente, las baterías más comunes son las de iones de litio, que varían en capacidad según el modelo del coche, desde 16 kWh en algunos modelos más pequeños hasta 90 kWh en vehículos más grandes y con mayor alcance.

3. Los transformadores

Los transformadores son responsables de convertir la corriente alterna proveniente de la red eléctrica en corriente continua, que es la utilizada para cargar las baterías. Esta conversión equilibra los voltajes a los que operan tanto el motor como las baterías, optimizando el rendimiento del coche eléctrico.

Ahora que ya sabes cómo funciona un coche eléctrico, ¿Qué opinas de nuestros turismos de Invicta Electric? Ahora ves mejor nuestro D2S, ¿Verdad?